En un movimiento clave para el armado político del peronismo, Cristina Fernández de Kirchner y el gobernador bonaerense Axel Kicillof mantuvieron este jueves una reunión en la Ciudad de Buenos Aires para avanzar en la definición de la estrategia electoral de cara a las próximas elecciones legislativas. El encuentro comenzó a las 11 de la mañana y marca el segundo contacto directo entre ambos dirigentes tras el anuncio de la candidatura de la expresidenta como legisladora por la Tercera Sección Electoral.

La reunión se desarrolló a puertas cerradas y sin contacto con la prensa. Kicillof arribó al lugar sin realizar declaraciones. Según trascendió, el diálogo se enfocó en alinear posturas internas dentro del Partido Justicialista, especialmente después de tensiones previas relacionadas con la conformación de listas y el futuro del partido a nivel nacional.

Desde el entorno de ambos dirigentes indicaron que Cristina busca consolidar la unidad del espacio frente al avance de las fuerzas opositoras, principalmente La Libertad Avanza y el PRO, que han incrementado su presencia en el conurbano bonaerense. La expresidenta considera clave unificar la estrategia para garantizar un buen resultado en las legislativas de septiembre y en las elecciones nacionales de octubre.

En paralelo, desde La Libertad Avanza ya comenzaron a mover sus fichas en la provincia. El secretario de Culto, Nahuel Sotelo, aseguró que cualquier candidato de su espacio puede vencer a Kirchner en la Tercera Sección, e incluso se mencionó el nombre de Daniel Parisini como posible postulante, aunque su situación legal estaría en revisión por cuestiones vinculadas a su lugar de nacimiento y residencia.

El peronismo apuesta a cerrar filas y evitar una dispersión interna que debilite sus chances en la provincia más populosa del país. En ese marco, el tándem Cristina-Kicillof vuelve a mostrarse como el eje central del armado electoral.