Estas áreas operativas de la Municipalidad se hicieron presentes en calle Santiago 876 tras producirse el desprendimiento de una parte de un voladizo y del cerco de protección que tenía la fachada de la obra en construcción. No se registraron víctimas.
Este lunes por la tarde se produjo la caída de mampostería y cerco de protección de la fachada de un edificio en construcción en calle Santiago al 876 por lo que personal de guardia y funcionarios de Defensa Civil y Catastro, junto a agentes de la PPC, se hicieron presentes en el lugar.
El Centro de Operaciones y Monitoreo Municipal (COMM) detectó, tras el registro de las cámaras, que el domingo continuaron con los trabajos en el lugar, a pesar de regir una clausura preventiva por parte de la Dirección de Catastro desde el sábado, por lo que personal de guardia de Defensa Civil del municipio se hizo presente para pedir que detengan los trabajos y mejoren las medidas de protección tanto para los trabajadores como para terceros.
Claudia Carrasco, directora de Catastro, explicó que los propietarios no contaban con autorización para trabajar los fines de semana. “Estamos muy exigentes con la presentación de permisos para demolición, que es lo que tiene esta propiedad. Principalmente en el programa de trabajo, en cómo van a hacer ellos la demolición, de forma manual o con alguna herramienta. En este caso, lo que es el Programa de Protección al lindero y a la fachada es indispensable. Nosotros no damos permiso a menos que el privado presente este programa, porque es fundamental. En este caso, el privado, si bien lo tenía otorgado, nosotros lo que constatamos es que ellos estaban trabajando fuera del permiso y por eso se aplicó la clausura preventiva del sábado”, remarcó la funcionaria.
Por su parte Luis Lamontanaro, director de Defensa Civil explicó que el trabajo que ellos efectuaron en la tarde de este lunes fue “eliminar el riesgo porque había unos palotes que estaban únicamente sujetos con alambres”, al tiempo que sentenció sobre las medidas que adopta para estos casos el municipio: «Vamos a acompañar al frentista o a los propietarios siempre y cuando respondan a nuestro llamado, pero si no, vamos a ser implacables con la seguridad para prevenir y cuidar a la comunidad de San Miguel de Tucumán».
A partir de esta tarde, la clausura del lugar pasó a ser total y se elaborará un informe sobre las diferentes actuaciones y requerimientos solicitados.