El Banco Central de la República Argentina (BCRA) dio un paso significativo hacia la inclusión financiera al habilitar a los jóvenes de entre 13 y 17 años a abrir cuentas bancarias en dólares a su nombre. La medida, anunciada este jueves, busca promover el acceso temprano al sistema financiero y permitir a los adolescentes manejar sus propias finanzas con mayor autonomía.
Cuentas en dólares: condiciones y beneficios
Según lo dispuesto por el BCRA, estas cuentas podrán abrirse sin necesidad de autorización de los padres o tutores, salvo que estos prohíban expresamente la operación. Las cuentas tendrán un límite de acreditaciones equivalente a tres Salarios Mínimos, Vitales y Móviles (SMVM), aunque este monto podrá incrementarse si los padres otorgan su consentimiento.
Además, los jóvenes podrán utilizar estas cuentas para realizar diversas operaciones, como retirar efectivo en cajeros automáticos, efectuar transferencias electrónicas y participar en inversiones, como la adquisición de participaciones en fondos comunes de inversión vinculados al Mercado de Dinero. Las cuentas serán gratuitas y, al cumplir los 18 años, se convertirán automáticamente en cuentas estándar para mayores.
Pagos en dólares con tarjeta de débito
En un esfuerzo paralelo por fomentar el uso de divisas en la economía formal, el BCRA aprobó una norma que permitirá a los consumidores realizar compras en dólares con sus tarjetas de débito. A partir del 28 de febrero, los comercios que deseen adherirse a esta modalidad podrán ofrecer a los clientes la posibilidad de elegir la moneda de pago.
Esta iniciativa busca, entre otros objetivos, que los dólares provenientes de regímenes de blanqueo se destinen al consumo en la economía real, contribuyendo a reactivar la actividad comercial
Impulso a la economía bimonetaria
Con estas medidas, el Banco Central avanza en el desarrollo de una economía bimonetaria, un esquema que busca ofrecer mayor flexibilidad a los ciudadanos y captar parte de los dólares que circulan fuera del sistema financiero formal.
Por un lado, la posibilidad de que los adolescentes abran cuentas en dólares fomenta la educación financiera desde edades tempranas, alentando el ahorro y la inversión. Por otro lado, la opción de realizar pagos en dólares con tarjetas de débito podría generar un impacto positivo en el consumo interno y en la recaudación impositiva.
Reacciones y desafíos
Si bien estas medidas fueron bien recibidas por algunos sectores, que las ven como un paso hacia la modernización del sistema financiero, también han surgido cuestionamientos. Expertos advierten sobre la necesidad de establecer controles estrictos para evitar posibles maniobras ilícitas, como el lavado de dinero.
El tiempo dirá si estas políticas logran sus objetivos principales: ampliar la inclusión financiera, dinamizar la economía y reducir la informalidad en el manejo de divisas. Mientras tanto, el BCRA parece decidido a seguir implementando medidas que fortalezcan la relación de los argentinos con el sistema financiero formal.