La alianza Juntos por el Cambio (JxC) podría fracturase en Tucumán por falta de acuerdo entre el PRO y la Unión Cívica Radical (UCR) para definir quién ocupará el lugar de candidato a gobernador, que representará a la coalición en las elecciones provinciales del próximo 14 de mayo.
El radicalismo local es presidido por el diputado nacional Roberto Sánchez, mientras que el líder del Partido por la Justicia Social (PJS) e intendente de la capital provincial, Germán Alfaro, representa al PRO. Tanto Sánchez como Alfaro pretenden ocupar el lugar de candidato a gobernador en las listas opositoras para los comicios de mayo, cuando se elegirán también vicegobernador, legisladores provinciales, intendentes, concejales y comisionados comunales.
La falta de acuerdo entre los referentes de la UCR y el PRO ya se había hecho visible en noviembre de 2022, cuando el líder radical se lanzó como candidato a gobernador, en fórmula con Sebastián Murga, referente del espacio CREO, y obtuvo el acompañamiento del presidente de la UCR a nivel nacional, Gerardo Morales.
En febrero pasado, Alfaro oficializó también su candidatura para encabezar el gobierno de la provincia, tras estrechar lazos con el jefe del gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta.
Así, el radicalismo anotó ante la JEP el frente «Juntos por el Cambio» acompañado por Participación Ciudadana, liderada por Paulo Ternavasio, dejando afuera al PJS, al PRO y a CREO. A su vez, Alfaro, inscribió al frente «Juntos para Cambiar Tucumán», que incluye a Compromiso Ciudadano Independiente y el Partido de las Ciudades en Acción.
En los últimos días se realizaron múltiples reuniones para tratar de conformar un frente conjunto, pero finalmente el actual diputado y el intendente se mantuvieron firmes en su postura de encabezar la fórmula de JxC.
Los espacios políticos que conducen Sánchez y Alfaro se enfrentaron anteriormente en las elecciones primarias de agosto de 2021, cuando la coalición de JxC presentó tres listas de precandidatos a diputado nacional y a senador nacional. En ese entonces Sánchez, que se desempeñaba como intendente de la ciudad de Concepción, se impuso en la categoría para la Cámara de Diputados ante Ramiro Beti, dirigente del PRO que a su vez encabezó las boletas del alfarismo. Alfaro ganó en la categoría del Senado, dejando atrás al radical Mariano Campero, uno de los dirigentes de Sánchez. Luego, en los comicios generales, Alfaro lideró la lista de JxC para la Cámara alta, y Sánchez, para la Cámara baja, que resultó ganadora. Finalmente, en la banca del Senado fue ocupada por Beatriz Ávila, y Alfaro siguió ocupando su lugar en el Municipio de San Miguel de Tucumán.
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