Los restos de cañas quemadas que cayeron por la tarde en la capital fueron arrastrados por el viento desde el este tucumano donde se produjeron quemas de cañaverales y pastizales. Soldado Maldonado, en riesgo.
Durante la tarde de hoy una intensa «lluvia negra» cubrió el cielo de la capital tucumana y alrededores, que fue producida por los distintos tipos de quema que se dieron en diferentes partes de la geografía tucumana, pero más específicamente en el este tucumano.
Es así que a la dirección de Defensa Civil provincial ingresaron ocho denuncias de quemas: cuatro de cañaverales y cuatro de pastizales, que habrían sido iniciadas por la mano humana de manera intencional o accidental, según consignaron desde la repartición.
En ese sentido, titular de la repartición, Fernando Torres, expresó que «los brigadistas forestales trabajaron intensamente en Pozo del Alto, en Cruz Alta, desde donde, calculamos por la dirección del viento, vienen las cenizas que caen en la capital. Pero de todas formas fueron ocho las denuncias que recibimos por la tarde desde puntos como Chicligasta, Tafí Viejo y Cruz Alta».
Siguiendo en esa línea, Torres recalcó que por las condiciones climáticas en distintos puntos el índice de peligro de incendio está entre muy alto y extremo, por lo que pidió a la población extremar las medidas para evitar que un incendio de mayor magnitud pueda desatarse.
Soldado Maldonado
El titular de la repartición también mostró su preocupación por la quema de plantas de citrus viejas que se está realizando en la localidad de Soldado Maldonado, en Monteros. «Los productores cuando sacan las plantas viejas las queman, y en esta oportunidad el fuego está yéndose hacia el monte por lo que podría ser muy peligroso y expandirse. Los bomberos ya están camino al lugar. Solo esperamos que las condiciones del viento no cambien».