El Presidente anunció que su gobierno marcha hacia un acuerdo político más profundo con el PRO, y que al considerar que «naturalmente va a fluir hacia eso».
La gira del presidente Javier Milei por Israel, Italia y el Vaticano quedó enmarcada en el frustrado tratamiento del proyecto de la ley «Bases» en el Congreso, donde se obtuvo un resultado adverso que, sin embargo, el Gobierno considera que puede «fortalecer» el rumbo de su gestión.
El Presidente anunció que su gobierno marcha hacia un acuerdo político más profundo con el PRO, al considerar que «naturalmente va a fluir hacia eso».
Además, en este periplo por el exterior, el segundo que realiza desde que asumió la jefatura del Estado, el mandatario condensó dos cuestiones a las cuales les dedica suma atención, como son la geopolítica y la faceta espiritual.
Cuando el jefe de Estado despegó en un vuelo comercial para iniciar su segunda gira fuera del país, la Cámara de Diputados se aprestaba para el tratamiento particular del proyecto de ley «Bases» que, tan sólo unas horas después, debió volver a comisión, en una suerte de «foja cero» legislativa.
Milei siguió telefónicamente las negociaciones que se desarrollaron luego de que se votaran negativamente algunos incisos y fue él quien pidió que se retirara la ley del debate parlamentario.
Horas más tarde, en su primera actividad pública, no dudó en reiterar lo que ya había dejado trascender a través de sus redes sociales: existen «traidores» al cambio elegido por la gente, son «los políticos de «la casta», a los cuales no dudó en catalogar como «kirchneristas de buenos modales».
Aunque en ese grupo se incluyó a radicales, peronistas que están por fuera de Unión por la Patria (UxP) y a diputados de la Coalición Cívica, todas las miradas fueron para aquellos que responden a los Gobiernos de Córdoba y Salta, y que tienen conexiones en la administración central.
En este contexto, y a poco de haber llegado a Roma, donde mantendrá un encuentro con el papa Francisco y se reunirá con la primera ministra italiana Giorgia Meloni, en la segunda parte de su gira, Milei dejó claro a través de un extenso mensaje publicado en sus redes sociales, su intención de mantener el rumbo de su gestión, pese al revés parlamentario.
En ese sentido, reafirmó que el proyecto de ley «Bases» reflejaba «el proyecto de país» que pretende el Gobierno, sostuvo que «más tarde o más temprano» dispondrá de las normativas que necesitan «los argentinos» y advirtió que no van a «ser cómplices del juego de los mismos parásitos de siempre que viven a costa de los argentinos».
En un extenso posteo en su cuenta de la red social X titulado «Cambio de Reglas», Milei criticó a los diputados que votaron en contra de algunos artículos de la ley que volvió a comisión y consideró que lo que se vio en el Congreso fue «un conjunto de políticos que van a hacer lo imposible para mantener sus privilegios».
«Dijimos que nosotros íbamos a enviar nuestros proyectos al Congreso y los políticos iban a tener que decidir de qué lado de la Historia querían estar, si querían ser parte del cambio o querían seguir manteniendo sus privilegios» y «también dijimos que si no acompañaban los cambios, los íbamos a exponer frente a la sociedad para que sus negociados, privilegios y corrupción quedaran expuestos», subrayó.
Poco después, desde la cuenta en X de la Oficina del Presidente se informó que Milei le solicitó las renuncias a la secretaria de Energía, Flavia Royon; y al titular de la Anses, Osvaldo Giordano.
Es por eso que fuentes oficiales consideran que la vuelta a comisión del proyecto era algo «esperable» para el Gobierno que termina por «fortalecer» el sentido político que pretende imprimirle a la administración.
«Salimos efectivamente fortalecidos porque mostramos lo que queremos hacer. La gente votó el cambio que propusimos en la ley y parte de la política no acompañó y me parece que hayan quedado expuestos quienes no acompañaron lo que la gente quería nos fortalece, lejos de habernos perjudicado», dijo el portavoz gubernamental Manuel Adorni en su conferencia del viernes.
Este sábado, Milei en declaraciones a Radio Mitre, volvió a fustigar a diputados opositores y gobernadores que no apoyaron la ley «Bases» en el Congreso, consideró que lo que pasó con la iniciativa fue «fabuloso» ya que dejó en «evidencia quiénes quieren el cambio y quiénes quieren seguir robando con la política».
Además, anticipó una profundización en su acuerdo de gobierno con el PRO y su líder, el expresidente Mauricio Macri.
«Dejé en evidencia que son unos delincuentes, generamos un ordenamiento ideológico, quiénes están a favor de la libertad y quiénes en el curro de la política. La gente pudo ver con claridad quiénes son los delincuentes y quiénes quieren sacar el país adelante», expresó el Presidente.
Su paso por Israel
Milei desarrolló en Israel (y hará lo propio en Roma y en el Vaticano) una agenda cargada de gestos geopolíticos y religiosos.
Fue a los pies del avión que lo había depositado en Tel Aviv y frente al canciller Yisrael Katz que el presidente reiteró su vocación de trasladar la embajada argentina a Jerusalén e insistió con su condena al accionar de Hamas, al que más tarde compararía con el nazismo.
El jefe de Estado se reunió con el presidente Isaac Herzog y con el primer ministro Benjamín Netanyahu, visitó un kibutz atacado el 7 de octubre de 2023, se encontró con familiares de rehenes, con empresarios, con autoridades religiosas y visitó lugares santos del judaísmo y el cristianismo.
«Para Javier el tema religioso es sumamente importante, este tema es central en su vida, este viaje fue muy movilizante para él», comentó a Télam uno de sus allegados al reflexionar respecto de la imagen del presidente llorando luego de conocer el Muro de los Lamentos.
Agenda en Italia
Ya en Italia, la dinámica se repetirá: habrá política en las reuniones con Francisco y con Giorgia Meloni, y habrá espiritualidad en el Vaticano.
Milei participará el domingo, con una delegación ampliada que suma a 30 empresarios argentinos, de la ceremonia de canonización de «Mamá Antula», la primera santa argentina y el lunes se reunirá con el Sumo Pontífice.
Aunque muchos quisieron leer en la presentación de un proyecto para derogar la ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE) un gesto hacia el Vaticano, en la Casa Rosada aclararon que si bien el presidente está en contra del aborto, el Ejecutivo no impulsó esa iniciativa.
En ese sentido, recordaron que mientras el proyecto de IVE había sido rechazado durante el Gobierno del expresidente Mauricio Macri, Francisco se mostraba distante, y que lo contrario se vivió con Alberto Fernández.
Los conocedores de los pasillos vaticanos dicen entonces que para entender qué quiere decir Francisco sobre un encuentro con un presidente hay que atender a todo tipo de detalles que van desde el lugar y el tiempo de la reunión hasta la postura en las fotos como también a los comunicados oficiales.
«Esperemos que el papa sonría», concluyó risueña una fuente gubernamental a Télam.
Télam