Una intervención de emergencia realizada por efectivos de la División Patrulleros del 911 permitió asistir con éxito a una mujer que se encontraba en trabajo de parto en una vivienda del barrio Ampliación Alejandro Heredia, en la Capital tucumana. La escena fue reportada por una niña, quien llamó al 911 al ver que su madre comenzaba con contracciones avanzadas.
El hecho ocurrió el domingo por la noche en una casa ubicada en calle 9 de Julio al 3.800. Al llegar, los policías encontraron a la mujer en pleno proceso de parto y, ante la urgencia y la dificultad del terreno, decidieron actuar rápidamente. “Improvisamos una camilla con un mesón y unas mantas para poder sacarla con cuidado”, explicó el cabo Nicolás Moreno.
La mujer fue trasladada en el móvil policial hasta La Maternidad, acompañada por su bebé recién nacido. En el trayecto, los efectivos implementaron un cordón sanitario con apoyo del personal de GEAM y Distritos Urbanos, coordinando cortes de tránsito mediante el sistema de comunicación del 911. El vehículo avanzó a baja velocidad, sin sirena, solo con balizas encendidas, resguardando a ambos pacientes.
El cabo Agustín Brito detalló que fue clave la capacitación recibida: “La mujer ya estaba en trabajo de parto cuando ingresamos. Con los conocimientos que nos brindan en la fuerza, pudimos contenerla y asistirla hasta llegar al hospital”. Fue la primera vez que él y sus compañeros participaron en un operativo de este tipo.
Por su parte, Juan Figueroa, del Personal Transitorio Policial (PTP), remarcó la importancia de enseñar a los menores a usar correctamente el número de emergencias. “Gracias a la llamada de esa niña, logramos actuar a tiempo. Es vital que todos los chicos sepan cuándo y cómo pedir ayuda”, destacó.
La intervención no solo salvó a la madre y al bebé, sino que dejó en evidencia el valor del entrenamiento policial y la coordinación en situaciones críticas.