El empate entre Rosario Central y Boca Juniors en el Gigante de Arroyito dejó una fuerte polémica fuera del campo de juego. Durante el encuentro, se exhibieron banderas con contenido obsceno dirigidas al actual entrenador de Newell’s, Cristian Fabbiani, lo que generó una rápida reacción por parte de las autoridades.
El Ministerio de Seguridad de Santa Fe resolvió sancionar al club rosarino con la prohibición de ingreso de banderas e instrumentos musicales en sectores específicos del estadio para el próximo partido ante Talleres. Las zonas afectadas son la platea del río y la popular Regatas, donde se desplegaron los trapos ofensivos. Además, se evalúa una posible multa económica por parte de la Liga Profesional.

Desde Rosario Central, la Comisión Directiva emitió un comunicado repudiando lo sucedido y llamando a los hinchas a expresarse con respeto. El presidente Gonzalo Belloso también se pronunció, ofreciendo disculpas públicas a Fabbiani y destacando que el club debe ser símbolo de celebración y no de provocaciones.

El episodio, que se viralizó en redes sociales, pone en foco la necesidad de reforzar los valores dentro del fútbol argentino y evitar manifestaciones que excedan los límites del folclore deportivo.