La Fórmula 1 atraviesa días de intensas especulaciones, y una de las teorías más resonantes involucra directamente a Christian Horner, Flavio Briatore, Bernie Ecclestone… y a Franco Colapinto.

Tras la salida de Horner como jefe de equipo de Red Bull, comenzaron a circular versiones que lo vinculan con un ambicioso proyecto: la compra de la escudería Alpine. Pero no estaría solo. En la operación también estarían involucrados Briatore —actual asesor ejecutivo del equipo francés—, Ecclestone —histórico mandamás de la F1— y hasta Sebastian Vettel, quien cumpliría un rol de asesor técnico.
Según medios especializados de Europa y Asia, Horner y Briatore habrían comenzado a tejer una alianza ante una eventual venta de Alpine por parte de Renault. Incluso se menciona que Ecclestone sería uno de los inversores mayoritarios, mientras que Vettel, retirado desde 2022, acompañaría el proyecto desde un rol más estratégico.
El periodista español Pedro Fermín Flores, con más de dos décadas cubriendo F1, deslizó en sus redes sociales que este “grupo de amigos” podría estar buscando una nueva oportunidad de inversión tras intentar controlar Red Bull desde adentro. También el analista indio Kunal Shah —ex Force India— respaldó la versión, asegurando que “Horner conseguirá inversores para comprar Alpine, con Briatore como socio y negociador”.
¿Dónde entra Colapinto en esta historia? Precisamente ahí está lo más interesante. Horner ya había mostrado interés por el argentino cuando intentó llevarlo a Red Bull, y fue Briatore quien, según se supo en noviembre de 2024, también posó sus ojos en el joven piloto. Juan Cruz Álvarez, ex GP2 y conocedor del paddock, avaló esta línea: “No sería descabellado. Toda gente muy pro Franco. Si pasa, bienvenido”.
La hipótesis toma más fuerza si se recuerda una reunión en los boxes de Interlagos, Brasil, entre Horner, un poderoso empresario latinoamericano —sponsor confirmado de Colapinto— y directivos de una empresa tecnológica multinacional fundada en Argentina, también patrocinadora del joven talento. Las imágenes de aquella charla y las risas compartidas dejaron entrever una gran sintonía… ¿y un proyecto en común?

La clave de lo que viene está en Renault. El próximo martes anunciará a su nuevo CEO, y dependiendo del perfil del elegido, podría definirse si el Grupo continúa al frente del equipo de F1 o si abre la puerta a una venta. Sin un apoyo económico sólido, Alpine podría caer en manos privadas… y con ella, abrirse un nuevo capítulo en la carrera de Colapinto.
Hoy el equipo francés está último en el Mundial de Constructores. Y aunque el año pasado logró un doble podio en Brasil, la tendencia es preocupante. Si la venta se concreta, una gestión liderada por figuras que conocen el negocio y tienen afinidad con Franco podría ser la llave de ingreso del argentino a la Fórmula 1.
Los próximos días pueden ser decisivos. La política, los negocios y las ambiciones deportivas se cruzan. Y en el medio, aparece una nueva esperanza para el piloto argentino más prometedor de la actualidad.