La mujer acusada de haber sustraído el teléfono celular del gobernador Osvaldo Jaldo durante un acto oficial en La Cocha fue trasladada al Complejo Penitenciario de Mujeres Delfín Gallo, en cumplimiento de una prisión preventiva de 30 días dictada por la Justicia.
El traslado fue confirmado por el subcomisario Cristian Juárez, segundo jefe de la Unidad de Investigaciones Criminales y Delitos Complejos Sur, quien explicó que la medida fue ordenada por el juez Cristian Velázquez del Centro Judicial Concepción, tras una audiencia virtual celebrada ayer. La acusada había sido detenida previamente durante un allanamiento realizado en su domicilio, bajo supervisión del fiscal Fabián Assad.
Durante ese procedimiento, la Policía secuestró prendas de vestir que habrían sido utilizadas por la mujer en el momento del hurto, además de otros elementos electrónicos que ahora están siendo analizados en el marco de la investigación.
El robo ocurrió el miércoles de la semana pasada, cuando Jaldo participaba de un acto oficial en La Cocha. Luego de inaugurar una oficina del Ministerio de la Defensa y compartir un almuerzo con funcionarios y dirigentes de varias comunas rurales en el salón “Rocío”, el mandatario comenzó a tomarse fotos con los asistentes. Fue en ese momento, al subir a la camioneta oficial para regresar a San Miguel de Tucumán, cuando advirtió que su celular había desaparecido del bolsillo interno de su saco.
Según las primeras pesquisas, Liliana Carrizo, quien integraba la comitiva como parte de la delegación de Los Pizarro, sería la principal sospechosa del hecho.