El papa Francisco continúa internado en el hospital Gemelli de Roma tras ser diagnosticado con una infección polimicrobiana del tracto respiratorio, según informó este lunes la Oficina de Prensa de la Santa Sede. La condición del pontífice ha obligado a modificar su tratamiento y a mantenerlo bajo observación, en un contexto de lo que describen como un «cuadro clínico complejo».
La hospitalización del sumo pontífice argentino, que comenzó el viernes 14 de febrero, llevó a la cancelación de todos sus compromisos oficiales del fin de semana, incluida la misa del Jubileo para los artistas y la tradicional oración del Ángelus dominical. Aunque no pudo pronunciarlo, el mensaje fue leído en su nombre:
«Me hubiera gustado estar entre ustedes, pero, como saben, estoy aquí en el Policlínico Gemelli porque todavía necesito algún tratamiento para mi bronquitis», expresó Francisco.
El papa sigue en contacto con Gaza
A pesar de su estado de salud, el papa Francisco mantuvo su compromiso con la crisis humanitaria en Gaza. Durante el fin de semana, llamó a la parroquia de la Sagrada Familia, la única iglesia católica en el enclave palestino, para seguir de cerca la situación de las 600 personas refugiadas allí.
«Nos ha llamado el viernes y el sábado, tenía la voz un poco cansada pero estaba de buen humor y ha querido saber cómo estábamos», relató un colaborador de la parroquia en declaraciones al grupo Mediaset.
Desde el inicio del conflicto en la región, Francisco ha llamado diariamente a la parroquia, demostrando su preocupación por la crisis humanitaria. La única excepción fue el domingo, cuando el pontífice ya había advertido que dedicaría el día al descanso.
Incertidumbre sobre su agenda
Por el momento, el Vaticano solo confirmó la suspensión de actividades hasta el lunes. Sin embargo, aún se desconoce si el papa podrá retomar sus audiencias privadas y su participación en los eventos del Año Santo.
La próxima cita en su agenda es la audiencia general de los miércoles, mientras que el fin de semana tiene previsto presidir la ordenación de diáconos. No obstante, su presencia en ambas ceremonias dependerá de su evolución clínica.
El domingo, un cardenal ya lo reemplazó en la Misa del Jubileo dedicada a los artistas, lo que podría repetirse en los próximos días si su recuperación no permite que retome sus funciones.
Problemas de salud previos
A sus 87 años, Francisco ha enfrentado diversos problemas de salud en los últimos años. En 2021 fue operado del colon, en 2023 de una hernia abdominal, y desde hace tiempo utiliza una silla de ruedas por una lesión en la rodilla. Además, cuando era joven, le extirparon parte de un pulmón debido a una infección.
En marzo de 2023, el papa ya había sido hospitalizado en el mismo hospital Gemelli por una bronquitis, lo que obligó a una internación de varios días. En las últimas semanas, se lo vio con dificultades para respirar, lo que lo llevó a delegar la lectura de sus discursos en varias ocasiones.
Mientras se acerca la Pascua en abril, el estado de salud del papa Francisco genera preocupación dentro del Vaticano, donde se monitorea de cerca su evolución para definir su participación en las celebraciones religiosas más importantes del año.